«Si vas a firmar una franquicia, pregunta primero», Francisco Gómez #frentealespejo

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La franquicia es una fórmula de colaboración empresarial que dice asegurar una mayor fiabilidad a la hora de arrancar negocios. Y seguramente sea cierto en el caso de cadenas con renombre y con una trayectoria de seriedad. Pero como en España no existe una vigilancia efectiva de las autoridades, que evite el que cualquiera conceda franquicias sin responsabilidad alguna sobre el futuro del negocio, no queda otra que asegurarse por cuenta propia.

Y éstas son las 15 preguntas que no puede dejar de hacerse a las marcas elegidas, para no lamentarse después:

1. ¿Lo que me proponen es un acuerdo de franquicia o más bien una fórmula mixta de comercio asociado, como sucursalismo (la marca es propietaria del local), concesionario (pone el rótulo y poco más) o central de compras (la única relación es una mercancía más barata)?

2. ¿Por qué saber hacer (o know how) estoy pagando exactamente? Es decir, ¿tiene características únicas, como recetas secretas o sistemas operativos específicos? ¿Qué lo diferencia del de la competencia?

3. ¿Ha puesto a prueba el concepto de negocio en establecimientos (más de uno) propios durante un periodo de tiempo razonable, para demostrar que funciona?

«Como en España no existe vigilancia de las autoridades sobre la franquicia, no queda otra que asegurarse»

4. ¿Cuántas unidades operativas han cerrado o han sido recomprados por la central o por otro emprendedor? ¿Qué razones han motivado estos cierres?

5. ¿Está el negocio plasmado en manuales suficientemente completos como para que su aplicación sirva para alcanzar al menos la supervivencia del negocio?

6. ¿Dispondré de un área de exclusividad, en la que no podrá establecerse ninguna otra unidad operativa de la enseña sin mi consentimiento?

7. ¿Contaré con un plan de negocio adaptado basado en un estudio de mercado real de mi zona, contando el público objetivo, la competencia existente, etcétera?

8. ¿Qué sucede si no quiero continuar con el negocio? ¿Puedo venderlo o existe una cláusula del contrato que establezca restricciones para dicha transacción?

9. ¿Estoy obligado a adquirir todos los productos de proveedores determinados por la central, sin poder negociar mejoras con marcas mejor consideradas por los consumidores de mi zona?

10. ¿Contaré con la ayuda del departamento de recursos humanos para la selección mi plantilla? ¿Hay una bolsa de trabajo para suministrarme personal si sufro bajas inopinadas?

«¿Provienen los fundadores de la franquicia de una experiencia anterior, exitosa… o fracasada?»

11. ¿En qué se emplea exactamente el canon de publicidad recaudado cada mes? ¿No debería de destinarse una parte a costear la publicidad local en mi zona de influencia?

12. ¿Dispone la central de algún tipo de acuerdo financiero con bancos para apoyarme a la hora de financiar mi negocio?

13. ¿Pertenece la franquicia a una marca conocida (normalmente el proveedor del principal producto o servicio comercializado)? ¿Proviene su equipo directivo de anteriores experiencias franquiciadoras, exitosas o fracasadas?

14. ¿Qué plan de expansión tiene la marca? Porque a medida que abra unidades crecerá su notoriedad, lo cual es positivo para cada franquiciado. ¿Qué inversión ha previsto para ello?

15. ¿Puedo disponer de la lista completa de franquiciados actuales, para llamarles con libertad y consultarles si todo lo que se me ha dicho se cumple?

Tampoco es para tanto: un franquiciador serio podría dar cuenta de ellas en 10 minutos. Ahora bien, uno menos serio puede atragantarse a la tercera…


Francisco Gómez es consultor especializado en comercio y franquicia, y fundador de Iberetail.