«Networking: ¿deporte para empresarios o fórmula para conseguir contactos?», Miguel Armijo #frentealespejo

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Networking. Un «palabro» cada vez más escuchado en el ámbito empresarial. ¿Sabemos realmente lo que es? Un grupo de personas que –tengan relación entre ellos o no– intentan darse a conocer o mejorar sus contactos profesionales, y posteriormente crear oportunidades de negocio. Así de sencillo. Pero al igual que con el deporte, al iniciarlo debemos tener claro que somos aficionados, y que no podemos disputar la Champions desde el primer momento…

¿A qué me refiero? Pues que al igual que un deportista inicia su recorrido poco a poco, en el networking deberíamos hacer igual. Mi consejo –y es el que implantamos en nuestra organización de networking: BNI– es entrenar mucho y bien, para posteriormente, y creciendo en las habilidades que conlleva, conseguir las tan ansiadas oportunidades de negocio.

Y éste es otro de los grandes errores de los «cazadores» networker: que atosigan y sólo quieren conseguir resultados ellos… En mis reuniones de BNI todos buscamos oportunidades de negocio; y las ventas llegan –si es el caso– posteriormente, y ya no dependen del contacto, sino de factores como nuestra habilidad comercial, el interés de nuestros productos/servicios, y sin duda la relación calidad/precio de los mismos.

«Preparemos muchas tarjetas y un mensaje claro para que la persona con la que hablemos se lleve «algo» nuestro»

Pero volvamos al principio. Comencemos nuestro entrenamiento básico. Debemos tener claro dónde y a qué vamos:

  • Si es una reunión de muchas personas, sin duda preparemos muchas tarjetas y un claro y breve mensaje (pitch elevator) de modo que, en poco tiempo, el empresario con el que hablemos se lleve «algo» nuestro.
  • No utilicemos palabras técnicas ni entremos en temas farragosos, pues es probable que la otra persona desconozca de qué hablamos, y lo que es peor, deje de interesarle. Estemos más a ofrecernos que a pedir, y de esa manera nuestros interlocutores guarden mejor opinión y, probablemente, nos recuerden días después.
  • Si es una reunión más especializada (sectorial) o con un número pequeño de asistentes, vayamos con más material (publicidad, merchandising…) porque tendremos más tiempo para estar con cada persona y podremos ofrecerle, sin que se note, nuestros productos; al llevarse material nuestro, nos recordarán después.
  • Si podemos, vayamos acompañados por un socio o colaborador. Nos da más capacidad de trabajo e incluso apoyo en caso de surgir una buena oportunidad; dos, ven y oyen siempre más que uno.
«Si podemos, vayamos acompañados por un socio o colaborador. Nos da más capacidad de trabajo»

También, debemos, al igual que en el deporte, conseguir con dedicación y tiempo, mejorar nuestras técnicas de relación y comunicación, y por supuesto la «puesta en escena» de aquello que queremos ofrecer. Estoy cansado de ir a reuniones de networking en las que los empresarios sólo van a tomar algo y ver qué pasa.

Insisto, si queremos pasar de un mero entretenimiento a jugar en los ligas mayores, e incluso obtener buenas puntuaciones, debemos tomárnoslo como lo que es: algo profesional a lo que hay que dedicarle tiempo y esfuerzo.

Un buen networker se hace, no nace…


Por Miguel Armijo Herrera, Director Ejecutivo de BNI Madrid Este, Oriental y Guadalajara, y Andalucía Centro.