El ‘renting’ de automóviles de empresa puede suponer una rebaja del 20% en el presupuesto, frente a la opción de compra. Por eso, en Caralin Group contamos con más de 700 clientes que ya se han sumado a esta herramienta empresarial, no sólo gracias al poderoso argumento del ahorro, sino como fórmula de liberar recursos de tesorería para hacer frente a otros gastos que conlleven menos depreciación que los vehículos.
Caralin Group apuesta por el ‘renting’ de vehículos empresariales, ahorrando a la empresa hasta un 20% anual de gasto frente a la compra. El contrato de ‘renting’, a cambio de una cuota mensual, da derecho al uso y disfrute del bien durante el plazo establecido, además de incluir el seguro a todo riesgo, mantenimiento y reparaciones, cambio de ruedas, pago de impuestos, vehículos de sustitución, etcétera. A la finalización del periodo puedes optar por quedarte con el coche pagando la cuota denominada valor residual, devolverlo o cambiarlo por otro.
Las ventajas de esta fórmula empresarial son indiscutibles ya que permite el disfrute del vehículo sin tener que realizar un desembolso importante. Libera recursos de tesorería para hacer frente a otros gastos con menos depreciación que los vehículos y las empresas acceden a descuentos en la compra del vehículo que a nivel personal no se conseguirían, además de que los costes de mantenimiento no supondrán “sustos” en los presupuestos de las empresas. La cantidad mensual a abonar por dichos conceptos es fija durante el plazo contratado. «Fiscalmente también es una ventaja ya que este gasto no se refleja en el Balance de la empresa, dando a la misma una capacidad mayor de endeudamiento, y el IVA también es deducible, bien en su totalidad en caso de ser un vehículo que se utilice puramente para el trabajo, o hasta el 50% en caso de ser un vehículo que se use para la empresa a tiempo parcial», explica Juan Carlos Maté, director general de Caralin Group.
Además, Caralin Group ha desarrollado una herramienta más cómoda todavía con el denominado ‘renting flexible’. Se trata de un alquiler con riesgo nulo con el que se puede devolver el vehículo en cualquier momento sin penalización alguna y con el que solo se paga por lo que se usa. Actualmente hay un parque de más de 45.000 vehículos en esta modalidad cada vez más demandada.