«Ética financiera con ‘blockchain’ en épocas de incertidumbre», Dani García #frentealespejo

dani-garcia-frentealespejo

Hemos llegado a un punto en el que hay una imagen mental que va a ser muy difícil que nos quitemos: las entidades financieras han renunciado a cualquier posibilidad de ser un negocio ético.

Suena duro, lo sé. Pero a poco que hayas intentado hacer alguna gestión un poco compleja estarás de acuerdo conmigo. El sistema está pensado no para ayudar a la gente, sino para que algunos se llenen los bolsillos a tu costa.

Pensarás que, en el fondo, en eso se basa el comercio desde el principio de los tiempos. Alguien te ofrece algo, con la esperanza de quedarse, a cambio, tu dinero. Pero en el caso de los servicios financieros la cosa cambia un poco, porque ese algo con el que se comercia es la cartera de la gente. Es el dinero con el que comer, con el que dar una buena educación a los hijos, con el que sobrevivir simplemente.

Y más ahora, que vivimos una época de incertidumbre como pocas veces hemos conocido, a consecuencia de la pandemia del coronavirus y la crisis económica que viene con ella. Con tanta gente viendo sus ingresos reducidos, con tanta gente perdiendo su trabajo, no es admisible que los comisionistas sigan llevándose cantidades desorbitadas. Y por operaciones tan básicas como, por ejemplo, permitir a un emigrante que mande a su familia las remesas que necesita.

«Creamos Davies porque creemos que todavía puede haber ética en las finanzas».

Por eso nos lanzamos a crear un negocio como Davies. Porque creemos que todavía puede haber ética en las finanzas. Porque estamos convencidos de que la gente tiene derecho a recuperar el control sobre su propia economía y no quedar subordinados a ningún banco.

Hasta hace poco, estábamos condenados a depender de ellos. Había pocas maneras de escapar, porque todos los canales para mover el dinero estaban en su poder. Sin embargo, hoy la tecnología nos ofrece una alternativa: la blockchain.

La cadena de bloques nos ha permitido crear una herramienta, como las criptomonedas, que pone las transacciones económicas al alcance de todos los públicos. A la hora de enviar dinero a otros países, nos encontramos básicamente con tres problemas: primero, las comisiones excesivas que nos cobran; después, los límites de cantidad que ponen muchas empresas que se dedican a este servicio; y por último, el tiempo que tarda en llegar.

«Creo en un mundo en el que las personas estén en el centro; y no las corporaciones»

La tecnología blockchain nos permite establecer un sistema instantáneo para transferir dinero, por medio de criptomonedas que no dependa de ningún agente exterior. Nadie se queda con ninguna parte que no le corresponde; nadie ralentiza innecesariamente el proceso; y nadie pone trabas burocráticas eternas.

Creo en un mundo en el que las personas estén en el centro; y no las corporaciones. En el que la incertidumbre sobre el futuro quede atrás, porque todos tengamos la libertad de gestionar nuestro dinero con absoluta libertad y con plena seguridad. Por eso, utilizar una tecnología como la blockchain para este fin, más que un negocio, es una obligación moral.

Al final, en entornos como el de las criptomonedas, la mayoría de las operaciones están soportadas por equipos de personas altruistas; pero no tienen empresas detrás. Algo debe cambiar.


Dani García es creador de Davies y fundador de Daviescoin.