Los cambios de la reforma laboral en la formación dentro de las empresas

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El apartado cinco del artículo 2 del Real Decreto Ley 3/2012 añade un apartado al artículo 26 de la Ley 56/2003, estableciendo que «la formación recibida por el trabajador a lo largo de su carrera profesional, de acuerdo con el Catálogo de Cualificaciones Profesionales, se inscribirá en una cuenta de formación, asociada al número de afiliación a la Seguridad Social» y que los «Servicios Públicos de Empleo efectuarán las anotaciones correspondientes».

«Nuevamente, la reforma laboral acerca la realidad efectiva del empleo en las empresas al SNCFP (Sistema Nacional de Cualificaciones y Formación Profesional), estableciendo un mecanismo de seguimiento de la formación que el trabajador va realizando a lo largo de su vida laboral», explica David Méndez, director de Dalyma Formación.

Ofrecer asesoramiento

«Desde enero de 2017 vamos a empezar a implementar formaciones en las empresas. Así, una vez realizada y finalizada la formación con éxito, se les acredita un reconocimiento de competencias -certificados de profesionalidad- en los cuales puedan ya empezar a cubrir el famoso cuaderno de formación que aparece en la reforma laboral, también llamada «cuenta de formación», y que pueda realizarse de una manera que no resulte traumática para la empresa, implementándolo de un modo progresivo», indica David Méndez.

Y es que el concepto de formación permanente y el concepto de formación acumulable alcanzan así una nueva dimensión legal y formal, materializándose en una «cuenta» formativa, que debe servir para facilitar la elaboración del dossier de competencias. Por tanto, simplificará los procesos de evaluación y acreditación. Además, cabe esperar su desarrollo reglamentario, previsto expresamente en la disposición final 2ª de la reforma laboral.

Medidas para las empresas

«Aquellas empresas que no programen o no dispongan de planes de formación adecuados para sus trabajadores, podrán incurrir en irregularidades y por tanto podrán recibir la visita de la «labor inspectora», hecho que ya está ocurriendo en algunas empresas de «grandes cuentas» entre otras», asegura David Méndez.

Así, desde Dalyma buscan generar valor y conocimiento de todas y cada una de las formaciones programadas para sus clientes. «Con el fin de que puedan ver un resultado final positivo y que, realmente, los recursos que destinan para la formación de sus trabajadores se traduzcan en la mejora de sus capacidades, aptitudes y actitudes», finaliza su máximo responsable.

Para más información, puede visitarse su página web o llamar al teléfono 987 031 235.