El año que estamos a punto de cerrar ha marcado un punto de inflexión en Caralin Group en cuanto a las peticiones de asesoramiento para exportar a otros países, pasando de un 12% a un 47% en los últimos 12 meses. El mayor interés se centra en el ámbito de la Unión Europea pero también, el continente asiático y países latinoamericanos.
El lento crecimiento de la economía española ha hecho a muchos empresarios plantearse la exportación de bienes y servicios para mantener una facturación adecuada mientras se recupera la normalidad financiera y aumenta el consumo nacional. «El aumento de las peticiones de consultoría para exportar evidencia que el empresario español se mueve y no está dispuesto a dar la batalla por perdida. Además, se están dando cuenta que la “Marca España” funciona muy bien y que en otros países ya son conscientes de la profesionalidad con la que producimos en nuestro país», comenta Juan Carlos Maté, presidente de Caralin Group.
Exportar en España
Esto concuerda con datos facilitados por el Ministerio de Economía y Competitividad que anunciaba que el crecimiento de las exportaciones acumulado por España entre enero y julio de este año está en línea con el de la Unión Europea (5,4%) y por encima del de la zona euro (4,9%). Comparando por países, entre las grandes economías de la UE sólo Alemania (6,8%) supera los resultados de España, que están por encima de los registros de Italia (5,2%), Francia (4,7%) y el Reino Unido (-2,0%). Fuera de la UE, el crecimiento acumulado de Japón (7,8%), contrasta con la caída del 5,4% de Estados Unidos.
En cuanto a los bienes y servicios más exportados, y por tanto que demandan otros países, mantenemos una línea ascendente en tecnología industrial, productos químicos y las materias primas, semimanufacturas y productos intermedios. «Es posible que la gente no sepa que nuestro país está a la cabeza de bienes de equipo. Por dar un ejemplo, uno de cada tres espejos retrovisores que lleva los coches en todo el mundo está hecho en España», explica Maté.