Justlimp detalla los elementos básicos en la limpieza de una oficina

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Tal y como ya nos han explicado los expertos de Justlimp en anteriores ocasiones, mantener unas condiciones adecuadas de limpieza en un negocio resulta imprescindible para su buen funcionamiento.

Y es que se estima que el 60% de las enfermedades contraídas en los entornos de trabajo son causadas por la falta de limpieza. Hay que considerar que la superficie de un teclado o de una silla de la oficina acumula, de media, decenas de miles de gérmenes por centímetro cuadrado. De hecho, los escritorios suelen tener más bacterias que la encimera de la cocina o el cuarto de baño del hogar.

Por eso, el mantenimiento de un espacio debe ser muy exhaustivo, como el servicio profesional que ofrecen en Juslimp. Y uno de sus requisitos es el control de todas las labores de limpieza, para lo que es recomendable establecer un registro en el que se contemplen todos los trabajos a realizar durante la prestación del servicio.

Las áreas imprescindibles a tener en cuenta son:

  • Quitar el polvo: eliminar el polvo de las áreas comunes con un trapo húmedo o una toalla de papel. Se puede usar aire comprimido para zonas difíciles de alcanzar, como los huecos del teclado, siempre que después se limpie el entorno. No hay que olvidar las lámparas y apliques ni los aparatos de ventilación. Además, el polvo se acumula en cualquier superficie, incluso las esquinas del techo, que también será necesario limpiar.
  • Cristal: para limpiar las manchas de ventanas, espejos y tabiques de cristal es preferible emplear un trapo humedecido en un producto específico para estas superficies. Lo mismo ocurre con los monitores y pantallas de ordenador.
  • Servicio en el baño: esto incluye limpiar y desinfectar el inodoro y todas las superficies, pero también rellenar los dispensadores de jabón y de papel.
  • Cocina: en el caso del área de descanso, por un lado nos centraremos en la nevera, que habrá que vaciar de productos en malas condiciones y aquellos que puedan estropearse; y, por otro, en los utensilios, limpiando los elementos de cubertería y electrodomésticos, así como organizando su almacenamiento.
  • Ordenar: bien sea reciclando o desechando los elementos que sean para tirar, bien colocándolos donde corresponda. Los artículos destinados la organización de espacios, como las bridas para cables, resultan siempre una buena inversión.
  • Vaciar los contenedores de basura / reciclaje: desechar adecuadamente las bolsas de basura y los materiales reciclables.
  • Desinfectar: hay que prestar especial atención a las áreas donde los gérmenes se pueden esconder con más facilidad, como las máquinas expendedoras, el microondas, los pomos…
  • Aspirar / barrer: a la hora de retirar la suciedad y los residuos del suelo y los muebles, es necesario desplazar los objetos que se encuentren por medio, como los cojines de un sofá.

Y si lo que queremos es poder centrarnos en el trabajo, y no tener que preocuparnos de la limpieza, siempre se puede acudir a empresas como Justlimp, que se encargarán de nuestras necesidades.