DOOD es un portero automático inteligente y universal. Es compatible con todas las instalaciones comunitarias, sin necesidad de tener que realizar una modificación en la infraestructura del inmueble. Sus creadores y promotores, Helena Calva y César de la Torre, nos hablan de su proyecto estrella.
«Desde el smartphone, DOOD permite abrir el portal, contestar a las llamadas realizadas desde la calle, silenciar los timbres y controlar cualquier cerradura eléctrica, electrónica o de garaje; todo ello de forma remota, utilizando para ello internet». Así de claro exponen los responsables de NewDomoTec, cuya actividad principal, en estos momentos, es el desarrollo y la fabricación de este portero automático inteligente y universal
«Además, estamos desarrollando nuestra propia smartlock, que complementará las funcionalidades de DOOD», señalan Helena Calva y César de la Torre, sus creadores.
¿A qué tipo de clientes va dirigido?
DOOD, como producto domótico, está dirigido tanto a clientes con vivienda propia, como a empresas, que pueden utilizarlo como sistema de control de acceso de trabajadores, visitantes, etcétera.
Incluso a propietarios de apartamentos de alquiler, que sean usuarios de plataformas como Airbnb. Y puede llegar a instalarse también en hoteles, con las ventajas que ello conlleva.
¿Qué valor añadido aporta DOOD al mercado?
«La principal ventaja del sistema que proponemos lo aportan las funciones únicas de nuestro producto», señalan ambos emprendedores. «A saber: no se necesita modificar la instalación comunitaria y se adapta a cualquiera realizada previamente; además de realizar las funciones de varias soluciones existentes en el mercado de forma centralizada a un precio muy inferior».
Y está en desarrollo cubrir posibles problemas, como avisar de la caída de red, de la luz o quedarse sin batería en el móvil. Además, es adaptable a entradas de casa de cualquier tipo.
«Solo cabe añadir que, a diferencia de otros dispositivos que hay en el mercado y que solo disponen de microcontroladores, nuestro producto cuenta con procesador propio. Lo que permite realizar actualizaciones online y dotar de mejoras y nuevas funcionalidades al «telefonillo», sin necesidad de un desembolso extra de dinero. Este innovador sistema es el que utiliza Tesla en sus coches».
¿Quiénes son los creadores de la iniciativa?
Los creadores y promotores de DOOD son Helena Calva y César de la Torre. Este último es Ingeniero Superior de Telecomunicaciones. Y antes de iniciar este proyecto, y tras concluir su carrera, ha trabajado siete años en empresas públicas y privadas, desarrollando su actividad en distintos campos de innovación. Actualmente, dedica su jornada al desarrollo técnico de DOOD.
Por su parte, Helena Calva Oria es Graduada en Diseño y Creaciones Multimedia por la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), ha trabajado durante más de una década como comercial en el sector tecnológico. En la actualidad, gestiona una sección del periódico de referencia en Cantabria, compaginando esta actividad con las labores de diseño vinculadas a DOOD.
¿Cómo y cuándo surgió la idea de negocio?
La idea surgió como necesidad personal, en concreto al romperse una cerradura del domicilio de César de la Torre. «Tras estudiar las alternativas existentes en el mercado, no encontramos nada que cubriera todas las necesidades que buscábamos. E iniciamos el desarrollo de una solución que se ajustase a la demanda del mercado», recuerdan estos dos emprendedores.
A quienes creer en la idea de DOOD les llevó a emprender su propia startup. Para el desarrollo de este proyecto se han invertido hasta la fecha unos 50.000 euros aproximadamente, provenientes de fondos propios o trabajos externos de consultoría. Dicho importe se ha destinado a la contratación de un empleado, a maquinaria y a materiales necesarios para la creación del prototipo.
«En un primer estudio de mercado, realizamos una fase de encuestas con más de un centenar de test. Siendo prácticamente la totalidad de ellas positivas, y consolidando que el producto genera un alto interés en el mercado, validando así nuestra idea de negocio», continúan.
Y con posterioridad, se ha realizado ya una fase de beta tester, con más de 100 usuarios y de 50 DOOD instalados.
Problemas durante la puesta en marcha
«Con el local tuvimos suerte, porque uno de los premios que hemos ganado con DOOD nos permite disfrutar durante dos años de un local en unas instalaciones municipales», reconocen ambos socios.
Sin duda, aseguran, lo más complicado a la hora de consolidar el negocio han sido los temas burocráticos. «Tenemos una gestoría que se encarga de la mayoría del papeleo, pero al no estar especializada en el sector TIC, a veces acabamos resolviendo sus dudas. En Cantabria es complicado encontrar una asesoría tecnológica».
Ahora, tras un año funcionando, César y Helena se dan cuenta de que están en un punto de inflexión, y se están planteando cómo pasar a la siguiente fase de forma efectiva. «Seguramente vamos a tener que solicitar ayuda económica externa para avanzar en el proyecto, por lo que valoramos realizar alguna ronda de inversión».
«Durante el próximo año nuestra intención es conseguir los fondos suficientes que nos permitan lanzar el producto comercialmente. Casi seguro que a través de financiación externa. Estimamos que tan solo llegando a los 1000 clientes, obtendremos una facturación aproximada de 120.000€».
Quienes deseen entrar en contacto con NewDomoTec, en busca de información sobre DOMO pueden hacerlo contactando directamente con César de la Torre Salceda, bien a través del teléfono o del correo electrónico.