Teico se integra en la plataforma de servicios Caralin Group

teico-caralin-group

Teico, servicio oficial Konica Minolta y Samsung en Madrid, es una firma especializada en la venta y reparación de impresoras multifuncionales y sistemas de producción de estas marcas. Sus productos nuevos están garantizados por las propias marcas, y ofrecen además fiabilidad y un sencillo mantenimiento.


Caralin Group, compañía especializada en la externalización de servicios de otras empresas y en la intermediación comercial, presenta un nuevo asociado dentro de su plataforma de servicios: Teico. Esta compañía, servicio oficial Konica Minolta y Samsung en Madrid, está especializada en la venta y reparación de impresoras multifuncionales y sistemas de producción de dichas marcas. Sus productos están garantizados por las propias marcas, y ofrecen fiabilidad y un sencillo mantenimiento. ¿Quieres saber más sobre Teico? Pulsa aquí.

Teico, que lleva 25 años en el mercado, ofrece un abanico de servicios  relacionados con equipos de impresión e imprenta. «Dentro de la Comunidad de Madrid nos dedicamos a la venta y mantenimiento de equipos de impresión y copia, así como de sistemas de imprenta», explica David Rodríguez, director comercial de Teico. «Nuestro servicio cuenta con un personal muy especializado, taller de reparaciones y asistencia técnica in-situ. Realizamos mantenimientos preventivos de las máquinas, disponemos de contratos para que su máquina siempre esté operativa. Suministramos consumibles y recambios a toda la geografía española. Damos soporte y asesoramiento a clientes y profesionales a través de correo electrónico o por teléfono. Trabajamos con las mejores marcas de mercado para ofrecerle productos de calidad».

Además, esta compañía vende máquinas nuevas y seminuevas ya que disponen de una sala de exposición donde poder hacer demostraciones del funcionamiento. «Ofrecemos varias soluciones de financiación como renting para la compra de máquinas. Queremos que todos los clientes puedan tener acceso a la mejor tecnología», concluye David Rodríguez.