«¿Conoces los secretos del corporate wellness para combatir la fatiga pandémica?», Fede Martrat #frentealespejo

Fede Martrat frentealespejo

Los efectos emocionales de la pandemia empiezan a hacer mella en el estado de ánimo. No sólo de aquellas personas que se han contagiado de la Covid-19, sino de la gran mayoría de ciudadanos, que vive esta situación con desánimo, tristeza, impotencia y apatía.

De entre todas las fuentes de estrés que nos ha brindado esta pandemia, la fatiga es una de las consecuencias más incómodas e inesperadas. Pues, según la OMS, ya afecta al 60% de la población mundial. Estos son los secretos básicos para combatir la fatiga pandémica, mejorar tu bienestar personal y aumentar tu productividad profesional.

Comienza entrenando la respiración. Antes de iniciar cualquier actividad, ya sea de índole laboral o personal, como por ejemplo, comer o salir a pasear, toma aire por la nariz y sácalo por la boca en el doble de tiempo. Repite esta acción tres veces, siempre antes de dar inicio a cualquier actividad.

Además, debes prepara tu posición. Busca un lugar donde te encuentres cómod@ y siéntate con la espalda erguida, pero relajada. Realiza esta acción de forma diaria y dedícale, por lo menos, cinco minutos.

Iníciate en la meditación. Una vez te hayas sentado en un lugar en el que te encuentres cómod@, “observa” el aire que entra y sale por la nariz. Mentalmente, puedes repetir las palabras “entra” y “sale” mientras inspiras y expiras por la nariz.

«Asigna parcelas de tiempo a cada cosa, y mantén tu escritorio siempre en orden»

Empieza a definir tus objetivos. Concreta, por escrito, tus objetivos; tanto profesionales como personales. Es importante que sean metas claras, alcanzables y medibles.

Y procura eliminar todos los malversadores de tu tiempo. Mantén tus herramientas en perfecto estado; en especial, las digitales. Elimina todas aquellas tareas que no son productivas y aprende a delegar.

Procura clasificar y organiza tu trabajo. Antes de empezar con tu labor, piensa bien en todas las tareas que vas a hacer. Asigna parcelas de tiempo a cada cosa, y mantén tu escritorio siempre en orden.

No comas solo porque hay que hacerlo; aliméntate. Escoge alimentos de verdad, y a poder ser, de buena calidad. Si tienes dudas sobre qué escoger piensa en un alimento que tú mismo podrías haber recolectado, cazado o pescado. Y no lo olvides: reduce al máximo el consumo de procesados y azúcares.

Aumenta el consumo de grasas saludables para una energía más estable. Incrementa la presencia de grasas saludables, como las semillas o los frutos secos, en tu dieta. Su consumo te ayudará a tener una energía más estable durante todo el día.

«No rendirás más por estar sentad@ frente al ordenador toda la mañana: cada hora, dedica cinco minutos a caminar»

Trata de favorecer las digestiones. El sistema parasimpático, el responsable de la calma y el descanso, es también el que controla la digestión. Siempre que sea posible, intenta favorecer el estado de calma en todas las comidas del día, desconectando del teléfono móvil y de otros estímulos.

Empieza el día de forma activa. Inicia la jornada con energía. Y para conseguirlo, dedica entre 5 y 10 minutos a realizar estiramientos, y conviértelo en un ritual diario antes del desayuno.

Aprende a tomarte un descanso. No rendirás más por estar sentad@ frente al ordenador toda la mañana. Siempre que te sea posible, de cada hora, dedica cinco minutos a caminar. También puedes aprovechar la pausa para realizar algunos estiramientos o alguna sencilla tabla de ejercicios.

Y mejora la postura. Si vas a estar sentado mucho tiempo, es imprescindible que revises tu forma de hacerlo. Siéntate en el borde de la silla con la pelvis neutra, los hombros alejados de las orejas y las piernas en ángulo de 90 grados.

Verás como me lo agradeces.


Fede Martrat es socio director de ActitudPro y colaborador académico de ESADE en Excelencia Comercial.